El lugar más popular para que los ciudadanos de Budapest hagan sus compras es el animado y bien surtido Mercado Cubierto (en el idioma local: Központi Vásárcsarnok) situado en la zona central.
De fácil acceso en transporte público, se ha convertido en una atracción no sólo para los lugareños que quieren comprar carne y verduras baratas, sino también para los turistas que quieren experimentar una verdadera tradición local.
El mercado central de Budapest es uno de los mayores mercados cubiertos de Europa y se encuentra en un elegante edificio con una estructura de hierro típica de finales del siglo XIX y un tejado decorado con azulejos de porcelana de Zsolnay.
Una visita al mercado cubierto de Budapest es una buena excusa para llevarse a casa productos típicos, comprar recuerdos, regalarse una comida típica o un bocadillo rápido, pero también simplemente para pasear admirando el bullicio de la gente ocupada en sus pequeños rituales cotidianos.
El mercado cubierto de Budapest es principalmente un mercado de alimentos, pero también hay puestos de artesanía y recuerdos.
Está distribuido en tres plantas. La planta del sótano está ocupada casi exclusivamente por vendedores de pescado; la planta baja -la que suele estar más concurrida- está dedicada a la carne y las verduras; en la primera planta encontrarás puestos de recuerdos, restaurantes y bares.
Los lugareños vienen aquí por la carne, el pescado, la fruta fresca y las verduras, mientras que a los turistas les gusta comprar productos típicos húngaros: pimentón, ajo, salami, hígado de ganso, licores, encajes, bordados, cerámica. Los restaurantes y bares de la primera planta son ideales para meterse algo en el estómago, quizás degustando algunas recetas tradicionales como langos, hurka o sült kolbász.
La construcción del mercado cubierto de Budapest, también llamado Mercado Central o Gran Mercado, comenzó en 1884, pero las obras se alargaron debido a un incendio que se produjo cerca de su finalización. Lainauguración oficial tuvo lugar en febrero de 1897.
En su realización trabajaron algunas de las mentes creativas y empresas más destacadas de la época: el diseño es del arquitecto y profesor universitario Samu Pecz, la estructura de acero fue construida por la fundición Schlick, y las decoraciones son de cerámica de Zsolnay.
Una reciente restauración ha mantenido intacto el encanto original del edificio y ha mejorado su funcionalidad.
A lo largo de los años, el mercado ha tenido muchos visitantes distinguidos, incluida una visita histórica de Margaret Thatcher en 1984.
La City Card le permite ahorrar en transporte público y/o entradas a las principales atracciones turísticas.